Klaus Lothholz


Rendí la prueba del bachillerato en Valparaíso después de haber visitado los Colegios Alemanes de Santiago y Valparaíso. Egresé de la USM en 1955, titulándome como Ingeniero Civil Químico en 1956. Cabe destacar la excelente preparación en los ramos básicos como matemáticas, química orgánica y químico-física, y sobre todo la metodología cómo estudiar y aprender, aceptando solamente los hechos que realmente convencen. Recuerdo el lema del Dr. Appel: “No deben entregar la cabeza a la entrada de la sala de clases”. Salimos conscientes que nos faltaba mucho por estudiar, a diferencia de otras Universidades. A mi, por ejemplo, me faltaban totalmente las Operaciones Unitarias de Ingeniería Química, que durante mi carrera profesional pasaron a ser mi especialidad. Para mí fue un verdadero desafío introducir este ramo en la USM como profesor part-time.

 

Trabajé en ENAP desde 1956 hasta 1973, primero en Concón, más adelante en Concepción y Santiago. Tuve la suerte que en ese tiempo la industria petrolera en Chile estaba en expansión y modernización. Me tocaron funciones importantes en el desarrollo de la ingeniería de procesos para esos proyectos en Concón y Concepción. Fue una satisfacción constatar que las firmas extranjeras reconocían la excelente preparación de los profesionales chilenos de todas las especialidades.

 

En 1973 tomé la difícil decisión de cambiar mi campo de actividades a otro continente, a otro idioma técnico y a otro rubro en la firma Lummus en Alemania, especializada en petroquímica y refinación del petróleo. La experiencia acumulada en Chile en la operación de plantas petroquímicas me sirvió muchísimos en mi nuevo trabajo de negociación con clientes, diseño e ingeniería de plantas, lo que facilitó mi carrera en la nueva firma, llegando a ser Jefe de Tecnología e Ingeniería de Procesos.

 

Desde fines de 1994 soy jubilado activo, pero ya no en mi profesión. Entre los hobbies preferidos están los viajes de estudio, últimamente China, Polonia, Marruecos, Namibia y St. Petersburgo. Para documentar estos viajes saco videos digitales, que con mucha paciencia y tiempo (hobby solamente para jubilados) convierto en cortometrajes en DVD de max. 60 minutos con títulos y música de fondo. Un bonito recuerdo. Además soy tesorero del Centro Cultural para la Tercera Edad de Taunusstein, con 600 socios y más de 20 actividades (entre otras literatura, música, filosofía, viajes de estudio, historia, inglés, computación, etc. etc.). Los instructores trabajan todos ad honorem.

 

Desde 1973 estamos radicados en Taunusstein, cerca de Wiesbaden y Frankfurt. Las 3 hijas por suerte viviendo en los alrededores. Los nietos desarrollándose, estudiando informática,  ingeniería comercial y medios de comunicación.

 

 

 

Klaus y su esposa Dagi residen en Taunusstein, cerca de Wiesbaden y Frankfurt