Los sansanos y la parada del 21 de Mayo
La parada del 21 de Mayo siempre es un gran evento en Valparaíso y por supuesto que la USM era también una de las instituciones que participaban en el desfile. Esta nota preparada por Manuel Mariño (graduado en 1951) y
La parada en que participan estudiantes de Valparaíso siempre tuvo en la USM participación tanto de los alumnos internos como de los estudiantes, incluso de profesores y decanos (ver Foto 1). La participación de la USM en esta parada data de los comienzos de la USM en los años 30, y se realizó sin interrupción hasta finales de los 60s. A partir de los 70s no recuerdo que la USM haya participado en el desfile. En los 80s y 90s solo en forma esporádica hubo participación de la USM. Sin embargo en 2011, con el entusiasmo de los sansanos Felipe Repetto, Martín Eliceiry y un grupo de sus colegas de generación la delegación de la USM desfiló con sus abanderados usando el uniforme de la USM. Felipe y Martin se preocuparon de preparar los uniformes de los abanderados como una replica exacta de los uniformes de parada de los Internos anteriores a los 70s (ver Referencia).
Sin duda que el entusiasmo de Felipe, Martín y los demás sansanos que han participado estos últimos años merecen una nota especial de nuestro sitio de recuerdos y ojala otros sansanos continúen con esta bonita tradición.
Manuel Mariño, quien fue el abanderado de la USM recuerda los desfiles de su época de estudiante sansano “La Universidad Santa María desfilaba todos los años el día 20 de mayo, al igual que los demás planteles educacionales, pues el día 21 solamente desfilaban las fuerzas armadas. El orden para el desfile de los estudiantes era más o menos así: A los sones de una marcha interpretada por la banda de la Marina, primero desfilaban los colegios de enseñanza primera, luego los de enseñanza secundara y a continuación la Universidad Santa María. No recuerdo que hayan desfilado las otras dos Universidades que había en aquella época, es decir, la Universidad de Chile y la Universidad Católica. Finalmente desfilaban los colegios que tenían banda propia. El orden para el desfile estaba preparado de antemano por el personal de la Marina, de acuerdo con una inscripción previa de los planteles que iban a desfilar.”
Algunos días antes del 20 de mayo, se colocaba un aviso en el Hall de Montaje con instrucciones para quienes quisieran desfilar, básicamente indicando que debían presentarse alrededor de las 9 de la mañana del día 20 en la plaza Sotomayor. Todos los internos eran siempre reclutados por el Prof. de Gimnasia de la época (Carlos Strutz en los 1930s, Eric Lundberg en los 1940s y el recordado "Pandereta" Schmidt en los 1950-1970s). A los sansanos internos se les entregaba el uniforme de parada al ingresar a la USM, "para el resto de los que se reclutaban era voluntario tener el uniforme y en verdad muchos lo tenían" nos cuenta Manuel.
En general, todos los estudiantes tenían alguna preparación para desfilar, incluso los que habían ingresado el año del desfile, pues ya lo habían hecho cuando eran estudiantes en la enseñanza primaria y secundaria, como era costumbre en aquella época, en que casi todos los colegios se preparaban para desfilar, incluyendo las revistas de gimnasia a fines de año. Sabían como organizar la formación y llevar el paso al compás de una marcha militar. Esto era válido también para las estudiantes mujeres, como se puede ver en la fotografía del año 1947 (ver Foto 2), que fue el año en que comenzó la enseñanza de la carrera de Decoradora de Interiores en la Universidad, por lo que fue la primera vez participaron mujeres en el desfile de la USM, detrás de los profesores y delante del grupo de estudiantes hombres. Como se puede ver en la foto, salvo una sola excepción, todas llevan el paso correctamente.
En 2011
Nos dice Felipe “con esto cumplí un sueño el 2011 al poder desfilar vistiendo el uniforme oficial de antaño, y en el camino se sumo mi mejor amigo Martín Eliceiry. Ambos fuimos abanderados de Chile y la USM respectivamente. Yo he participado estos dos años a pesar de estar egresado y en proceso de titulación. La verdad es que nadie nos escogió como abanderados, solo fue un premio a la motivación de haber preparado el uniforme, que espero usar este año en la titulación”.
Agradezco a Manuel y Felipe por sus relatos y fotos. Sin duda que esta es una bonita historia sansana para recordar.